Sé que puedo ser mucho mejor persona de lo que soy ahora.
Sé que tal vez me equivoque en muchas cosas.
Sé lo que se siente cuando de repente, pierdes un tesoro por una pequeña circunstancia, porque llegas a tu punto extremo de paciencia durante diez minutos...y te preocupas demasiado por lo que amas...pero aún, ni yo ni nadie encuentra motivo alguno que explique esto. Ni siquiera se puede definir, es una situación complicada, una pesadilla continua, un recuerdo continuo de pequeños momentos que alimentaron una relación y la hicieron muy fuerte.
No se puede pedir que alguien que se siente impotente, destrozado, utilizado, engañado, decepcionado...no derrame un millón de lágrimas por lo que ama, por lo que vive y respira, porque ve que lo que le hace sonreir todos los días, de lo que se acuerda nada más abrir los ojos todas las mañanas se haya escapado de manera incomprensible.
Necesito volver a soñar, necesito volver a creer en los cuentos de hadas, necesito creer de nuevo en los principes azules, necesito creer en ti de nuevo. Muchas veces, en momentos de desesperación grito tu nombre entre lágrimas contra la almohada, pero no obtengo respuesta, nadie me ayuda a volver a sonreir, a volver a disfrutar, a vivvir. Nadie me oye cuando pido ayuda.
¿Dónde quedó todo aquel amor? ¿A dónde se escaparon todas las sonrisas tiernas y llenas de dulzura? ¿Dónde están aquellos eternos minutos gastados en mirarnos el uno al otro echados sobre tu cama?...Parece ser que, aquella persona que me enamoró se esfumó en un abrir y cerrar de ojos...Parecía haberse ido, pero muchas veces, cuando me miras, la encuentro allí dentro de tí, pero de repente se vuelve a esfumar...Cambias al igual que lo hace el viento, al igual que un niño cuando se cansa de un juguete...
Pero te diré algo, tu eres el que decides, tu eres el que importa, tu eres el feliz, tu eres el que tiene el mundo a sus pies, tu serás el que sufrirá las consecuencias de todo lo que haga, tu serás el que perderá el tren, tu serás el que no volverá a tenerme en sus brazos, no tendrás mis caricias, mi sonrisa, mis abrazos, mis detalles, no me tendrás cuando las cosas te vayan mal, no tendrás mis tonterías, no tendrás celos, no tendrás de que preocuparte, no tendrás con quien descubrir Italia, Nueva York, París, ni tendrás todo lo que has tenido hasta ahora, no tendrás ni siquiera mis palabras, no tendrás ni derecho a hablarme, porque una persona que ni leyendo esto, ni viendome llorar, destrozada, no trata de recuperar lo que ama, no tiene perdón alguno...
Pero eso sí, te aseguro que ME RECORDARÁS. me echarás de meonos y no estaré...aún tienes una oportunidad, piensa, reflexiona y luego haz lo correcto, lo que tu creas conveniente, pero el tren aún está parado en la estación, esperando por el último pasajero...
Abre los ojos...
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